Cangrejo Pistolero Ediciones –baturrillo poético, red de redes–, es mundo aparte. Sin embargo, no por ser mundo aparte se cierra al mundo. Más al contrario: sus puertas están abiertas de par en par a quienes deseen asomarse, echar un vistazo, interactuar con ella en la red. Se trata de una editorial polifacética y andariega, que no camina hacia atrás (todo cangrejo lo ejecuta), sino adelante. Es, por decirlo de algún modo, una editorial atípica, que no sólo aprecia y degusta versos: Ilustraciones por doquier y escenificaciones varias forman parte indisoluble de su esencia.
Cangrejo Pistolero Ediciones acoge a poetas de la nueva ola que viene gestándose desde 1970, los reúne, los muestra en negro sobre blanco, los promociona. Sin embargo, no es oro todo lo que reluce. No. Cualquiera, dicho así, a secas, sin tinte ni cariz, no debería publicar. Según los preceptos de la propia belleza literaria, hacer un poema va más allá de su mera trascripción en papel o en la pantalla de la computadora: el proceso creador no se agota con la “divina” escritura. Las editoriales son perfectas conocedoras de este hecho. Cangrejo Pistolero Ediciones, que en principio no constituiría excepción alguna a la regla, a veces peca de demasiado optimista con los textos que airea. Las ilustraciones que recogen sus volúmenes, por el contrario, atesoran, todas, sin excepción, una calidad soberbia.
El libro como objeto de arte es idea fundamental, aspiración constante de esta lozana y juvenil editorial. En sus publicaciones se conjugan pensamiento y arte, concepto y trazo, a partes iguales, hermoseándose, digámoslo así, bis a bis ambos parámetros. Poetas de diverso pelaje ven sus poemas realzados por el arte plástico en los volúmenes que les edita el Cangrejo. Pero hay lectores a quienes les parece increíble en qué medida una ilustración puede llegar a ensalzar palabras que la describen a ella, ensalzándola también. Cangrejo Pistolero Ediciones es un juego continuo –a veces empalagoso, por demasiado infantil–, un ir y venir de las musas entre la pluma y el lápiz, entre el concepto y el color.
Ediciones como esta, cierto es, ya no se ejecutan. Tanto es así que la perfopoesía, incluso las artes escénicas, lo cual es puesto de manifiesto en los diversos eventos que la editorial sevillana organiza y que constituyen toda una red de redes en Internet, encuentran cabida en esta editorial. Lo funesto es que, en ocasiones, se raya en la superficialidad, en el verso fácil –más que libre, libérrimo–, en la escenografía pueril, en aquella “charanga y pandereta” de la “literatura” menos profunda. Sí, todo tiene su cruz: algunos adultos, que los hay, frecuentadores de literatura “de altos vuelos”, para otros densa y seria, demasiado conspicua, se resienten, de ordinario, con estas sonadas, alegres y pujantes bagatelas.
Fuente: Barataria
Fuente: Barataria
No hay comentarios:
Publicar un comentario